Se hicieron numerosos fichajes de categoría y muy costosos aquel verano, así que ascender a primera división se convirtió en una obligación para poder amortizar las nuevas incorporaciones. En la campaña siguiente concluye 15.º y el Villarreal disputó su primera competición internacional: la Copa Intertoto, que daba una plaza en la Copa de la UEFA, cayendo en una de las finales ante el Málaga C. F..