«magiares mágicos», se sumaron a una plantilla que más tarde fue conocida como el «Madrid de Di Stéfano» y que ganó nueve ligas, una Pequeña Copa del Mundo, una Copa Intercontinental y dos Copas Latinas en 1955 y 1957 (que fueron un primer intento de organizar un torneo de prestigio entre clubes de Europa). Eso se vio reflejado en la fundación de nuevas secciones deportivas como las secciones de tenis, boxeo, bolo palma, pelota, balonmano, gimnasia, halterofilia, remo, y ajedrez.